HISTORIA FAMILIAR

Siguiendo una trayectoria de la familia Arias-Ospina, el señor Alonso Arias fue un caficultor entregado a su finca, hasta el momento de su muerte, allí en la finca La Ilusión, vereda Calamar del municipio de Sevilla Valle, tenía la tierra sembrada en café variedad arábigo y variedad caturro, manejaba el beneficio del café en la misma finca, después de seco, lo bajaba hasta el corregimiento de San Antonio, municipio de Sevilla Valle, donde tenía su residencia, allí lo almacenaba y escogía, generaba empleo, pues llegó a tener hasta 15 mujeres escogedoras del grano, el cual salía excelso, tipo Federación, para luego ser despachado hasta el Municipio de Sevilla, efectuándose su venta en La Federación Nacional de Cafeteros, una filial en éste municipio.

«En épocas de cosecha, dos al año, se sostenían de doce a quince jornaleros, los cuales ayudaban con la cogida del grano; estos, permanecían de lunes a viernes, pagándoseles el jornal los días sábados. «

Para la recolección del grano, los jornaleros, cada uno, utilizaban al cinto canastos de mimbre y costales de fique, para ir acumulando el grano desde muy temprano, ya en las horas de la tarde bajaban el costal y éste era pesado en una báscula, y, dependiendo del número de kilos cogidos, así, era el jornal pagado, cabe anotar, que después de secado, el grano, era transportado desde la finca hasta el lugar de escogencia, en camperos marca Willys Jeep, vehículo de buena tracción para soportar las dificultades de la carretera que en épocas de lluvias (tiempo de cosecha), sufría deslaves, pérdida del balastro y por ende, en muchos tramos, resbaladiza.